24 DOMINGO  DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO C -   2019

     Una ojeada a la primera lectura y al evangelio nos descubre quién es Dios, y quiénes somos nosotros.

     En la primera lectura a través de una situación del pueblo del éxodo el autor nos descubre la bondad, paciencia y ternura de Dios.

     En el evangelio el evangelista Lucas nos narra tres parábolas a las que se les ha llamado tradicionalmente las parábolas de la misericordia. En ellas descubrimos otra faceta de nuestro Padre Dios, la alegría por hallar lo que se había perdido, por recibir al hijo que regresa.

PRIMERA LECTURA  Ex 32,7-11; 13-14

ü  Esta es una hermosa  página del libro del Éxodo donde se nos da un retrato de Dios y otro de Moisés muy interesantes.

ü  Se nos describe a Dios grandemente enojado con su pueblo, de tal forma que está dispuesto a eliminarlo y hacer un nuevo pueblo descendiente de Moisés.

ü  Por otro lado se nos presenta a Moisés con una relación muy familiar con Dios, de tal forma que le hace desistir de su empeño, nos damos cuenta también del amor tan grande que este hombre Moisés tiene para este pueblo que a veces le pesa tanto.

ü  Veamos un poco la descripción de Dios enojado:

·       Los seres humanos con frecuencia describimos a Dios enojado, cuando nosotros hemos cometido el mal, hemos pecado.

·       Una reacción muy normal en esta situación es tener miedo a Dios, considerarlo una fuerza opresora, dominante, de la que prefiero alejarme y por eso tantos se alejan de Él

·       Siempre me ha parecido que el mejor trabajo y el más exitoso del espíritu del mal es hacernos creer que Dios no nos quiere, que solo quiere que le demos honor, que nos quiere para su provecho. Nada más lejos de la verdad de Dios.

ü  Moisés negocia con Dios, dialoga, este pasaje nos recuerda un poco aquel otro en Abraham, el padre de la fe, negocia con Dios con respecto a los habitantes de las ciudades del valle:  Sodoma y Gomorra.

·       le hace ver que esto de eliminar a su pueblo va a resultar en contra de Él.

·       Y todavía le sigue insistiendo pidiéndole que recuerde a los padres Abraham, Isaac y Jacob a los que hice una promesa

·       Según el autor sagrado Dios desiste o cambia de manera de pensar.

·       Es interesante esta situación que sale más veces en la Escritura, Dios se deja "convencer" y "cambia." Creo que cambia porque Dios cree en la libertad que nos ha dado y la respeta. También creo que cuando en la Biblia describimos a Dios enojado y dispuesto a castigar porque su honor ha sido ofendido, más que un retrato de Dios damos un retrato de Dios según nuestra forma de ser.

·       Cuando llega Jesús nos va a dar la revelación plena de Dios y nos dirá que es Padre, su Padre y nuestro Padre.

·       Y la vida de Jesús misma, Jesús que es la imagen del Dios vivo  nos descubre que Dios no está preocupado por si mismo sino por nosotros.

SALMO RESPONSORIAL  Sal 51,3-4. 12-13. 17. 19

ME LEVANTARÉ Y REGRESARÉ JUNTO A MI PADRE

¡Ten piedad de mí, oh Dios, por tu bondad,

por tu gran compasión, borra mis faltas!

¡Lávame totalmente de mi culpa

y purifícame de mi pecado!

ME LEVANTARÉ Y REGRESARÉ JUNTO A MI PADRE

Crea en mí, Dios mío, un corazón puro,

y renueva la firmeza de mi espíritu.

No me arrojes lejos de tu presencia

ni retires de mí tu santo espíritu.

 ME LEVANTARÉ Y REGRESARÉ JUNTO A MI PADRE

Abre mis labios, Señor,

y mi boca proclamará tu alabanza.

mi sacrificio es un espíritu contrito,

tú no desprecias el corazón contrito y humillado.

ME LEVANTARÉ Y REGRESARÉ JUNTO A MI PADRE

v Si leemos los versos 1 y 2 sabremos que este salmo fue escrito por David cuando el profeta Natán le denunció su pecado de adulterio al haberse unido a Betsabé la esposa de Urías uno de sus generales, a quien hizo matar para cubrir su pecado.

v Percibimos un gran sentido de humildad y de dolor ante la magnitud de su pecado y sobre todo de su ser desagradecido hacia Dios que le había hecho tantos dones y beneficios.

v La iglesia reza semanalmente este salmo en los laudes de los viernes. Como iglesia, como pueblo de la nueva alianza, como pueblo redimido también nosotros tenemos necesidad de pedir perdón una y otra vez de nuestro ser tan desagradecidos por el don de la redención y de la libertad recobrada después de haberla perdido por el pecado.

EVANGELIO, Lc 15, 1-32

Ø  Lucas es un evangelista al que llamamos artista por varias razones:

§  Nos ha dejado el mejor retrato de María, pintado no con pinceles y pinturas, sino con unas narraciones sobre ella que nos la hacen presente como si la estuviésemos viendo.

§  Escribe en la lengua griega más perfecta y hermosa del Nuevo Testamento.

§  De entre las parábolas que circulaban en la comunidad de los primeros tiempos, ha escogido para dejarnos en el evangelio tres obras de arte que se han llamado las parábolas de la misericordia, o del amor misericordioso de nuestro Padre: la oveja perdida y encontrada, la moneda perdida y encontrada, el hijo "muerto" pero que ha vuelto a la "vida".

§  En todas estas parábolas percibimos el toque de la alegría, alegría del mal transformado en bien por obra del amor incondicional del Padre y por la conversión o regreso del hijo, o el encontrar lo que se había perdido.

§  Creo que todos hemos experimentado el gozo de encontrar algo que es valioso para nosotros y se nos ha extraviado.

§  Nos vamos a detener en el hijo pródigo, o en el padre pródigo. El hijo pródigo en pecado y egoísmo; el Padre prodigo en amor.

Ø  Sabemos todos la historia, hay algunos puntos de interés para nuestra vida hoy

     El hijo más joven, en la Escritura esta expresión es sinónimo de inmaduro, poco experimentado,

     Tierras lejanas, quiere decir que se aleja de su padre, que no quiere estar bajo su sombra, su cuidado, quiere ser independiente.

     El padre sale cada día al camino, si no hubiese sido así no lo hubiese visto llegar

     Su corazón de padre lo reconoce aunque está irreconocible, andrajoso, sucio, cansado, envejecido...

     Este padre es la pálida imagen del Padre de Jesús, nuestro Padre cuyo amor nos deja desconcertados hasta el punto de dudar de él.

     Su amor es maravilloso, sorprendente, siempre presente en nuestras vidas, ya dice la Escritura que el Padre nos conoce, nos ama desde antes de ser concebidos, y en el seno materno donde nos va tejiendo con cariño y ternura hasta hacer de nosotros una obra de arte.

     Si Jesús no nos lo hubiese dicho, creeríamos que son inventos del escritor sagrado.

     Otro punto de interés es el hijo mayor, a quien la envidia no le deja gozar de la fiesta, gozar del retorno del hermano pequeño.

     Aunque muchos de nosotros o casi todos creemos que somos el hermano pequeño, creo que  para las personas que estamos más en la iglesia, el peligro es que seamos con mucha más frecuencia el hermano mayor: lleno de envidia "nunca me has dado... para celebrar con mis amigos" "por este hijo tuyo haces fiesta...." "No quiso entrar en la fiesta, el padre salió a suplicarle...."

     Aquí se  nos dice a través de esta historia la verdad más atractiva de Dios, que nos quiere a todos por igual, y a todos nos perdona, se olvida de nuestros pecados. 

SEGUNDA LECTURA 1 Tm 1,12-17

ü  Esta carta seguramente no fue escrita por Pablo sino por un discípulo de la siguiente generación a la de Pablo.

ü  Veamos el mensaje que nos trae hoy esta carta:

v Pablo está agradecido a Cristo Jesús, nuestro Señor por haberlo considerado digno de hacer el ministerio, ya que él había sido un perseguidor de la iglesia.

v Cómo pesa en el corazón de Pablo el tiempo en que se dedicó a perseguir al Señor, en los cristianos.

v Pero también reconoce que obraba por ignorancia, por eso fue tratado con misericordia. Hay tantos que nos hacen sufrir y sin embargo lo hacen por ignorancia, sin darse cuenta del daño que causan.

v Dice también que Cristo vino para los pecadores, y él se considera el más grande de los pecadores.

v Considerar que fue tratado con misericordia para que Pablo sea un signo de la misericordia de Dios, de su amor a los pecadores.

v Termina con una alabanza a Dios.

Sabe el cielo y la tierra que he dicho y confieso la verdad sin ningún encarecimiento, antes digo lo menos que lo más, porque nunca había tenido cuenta con estas cosas, y ahora que la Santa Obediencia me obliga a escribirlo como en algunas cosas han pasado ya muchos años, más quiero dejarlas que decirlas por no considerarlas necesarias. Porque quien leerá las que dejo escritas, bien podrá inferir el modo que acostumbra Dios en almas que tales mercedes por su infinita bondad concede. Y otra causa me excusa el dejarlas en silencio y es que aquel modo con que Dios obra en el alma con tanta intimidad, dirigiéndola por la recta senda de su Santísima Ley, esto yo no sé explicar, porque lo hace Dios de manera que cuánto más obra, menos se entiende. En todo lo que he escrito, muchas veces me he visto muy confusa y llena de espanto recordando tales beneficios de Dios a un alma tan ingrata. Mil veces hubiere retrocedido de mi propósito si la fuerza de la obediencia no me hubiere obligado con todo su rigor. Y así espantada y confusa he rogado mil veces al Señor dirigiera mi pluma y no permitiera por su bondad, dijera yo cosa que en sí no fuera, ni en lo más mínimo y que antes se pegare mi lengua al paladar, primero que faltar a la verdad. En estos temores, más de una vez me ha dicho Nuestro Señor que bien podía escribir como quisiera, que en nada faltaría a la verdad, y que sin comparación podía decir mucho más de lo que diría.. Venerable María Antonia París, fundadora de las Misioneras Claretianas, Autobiografía  84.

Siendo aún muy niño, encontré en mi casa un libro que se titulaba el Roser, o el Rosal, en que estaban los misterios del Rosario, con estampas y explicaciones análogas. Aprendí por aquel libro el modo de rezar el Rosario con sus misterios, letanías y demás. Al advertirlo el maestro, quedó muy complacido y me hizo poner a su lado en la iglesia para que yo dirigiera el Rosario. Los demás muchachos mayorcitos, al ver que con esto había caído en gracia del buen maestro, los aprendieron también, y en adelante fuimos alternando por semanas, de modo que todos aprendían y practicaban esta santísima devoción, que después de la Misa es la más provechosa. San Antonio María Claret, Fundador de las Misioneras Claretianas, Autobiografía 45. 

BIBLIOGRAFÍA

CLARET, Antonio María Claret, Autobiografía.

PAGOLA, José A.  Following in the Footsteps of Jesus. Meditations on the Gospels for Year C.

PARIS, María Antonia, Autobiografía

RAVASI, Gianfranco, Según las Escrituras, Año C.

SCHÖKEL, Luis Alonso, Comentario a La Biblia de nuestro Pueblo.