PRIMERA LECTURA - Is 35,1-6a, 10
v De nuevo escuchamos en la
primera lectura al profeta Isaías con un mensaje de esperanza y alegría.
v En este texto hay como
tres partes y en todas ellas recibimos la misma invitación a regocijarnos.
v Los versos 1 y 2 nos dan
una descripción de como la naturaleza manifestará esta alegría de que habla el
profeta, florecerá, su belleza será como la del Carmelo, verán la belleza de
nuestro Dios.
v Los dos versos siguientes
3 y 4 son una invitación a cuantos se sienten pequeños, oprimidos, cobardes
ante el dolor, los que tienen miedo, los que dudan a recobrar las fuerzas,
porque Dios mismo viene para liberarlos.
v En los versos 5 y 6a se
describe lo que pasará a todos estos que hemos mencionado antes, cuando sea
realidad la presencia de nuestro Dios: los ojos ciegos verán, los oídos
cerrados se abrirán, la lengua que no sabe hablar, cantará
v El verso 10 es como el
final de las obras de teatro en que todos los personajes salen juntos, aquí el
profeta Isaías nos repite el tema de la alegría, ahora es una alegría
desbordante, regresan los rescatados con cantos, danzas, y termina anunciando
que cuando lo que ha anunciado de la presencia de Dios mismo rescatando su
pueblo sea una realidad, el dolor y la aflicción ya no existirán más.
v En el evangelio se nos
anunciará que esta presencia de Dios entre nosotros es Jesús.
v Cada uno de nosotros
puede entrar en su corazón y recordar con gozo el momento en que nuestra vida
cambió y entró en ella el gozo y la paz al abrirnos al encuentro del Señor y a
dejarle ser parte de nuestra historia personal.
SALMO RESPONSORIAL: Salmo 146
SEÑOR VEN A
SALVARNOS
El Señor mantiene su fidelidad para siempre,
hace justicia a los oprimidos
y da pan a los hambrientos.
El Señor libera a los cautivos,
abre los ojos de los ciegos
y endereza a los que están
encorvados.
El Señor protege a los
extranjeros
y sustenta al huérfano y a la
viuda
el Señor ama a los justos
y entorpece el camino de los
malvados.
El Señor reina eternamente,
reina tu Dios, Sión,
a lo largo de las generaciones.
¡Aleluya!



EVANGELIO Mt 11,2-11
Ø De nuevo tenemos a Juan
Bautista en el evangelio de este domingo.
Ø Juan ya no está a orillas
del Jordán predicando y bautizando
Ø Ha llegado el ocaso de
este profeta de fuego, no puede moverse, pero su lengua sigue interpelando a
Herodes y a todos nosotros.
Ø En la cárcel oye hablar
de Jesús, y está confundido, no entiende, no es esto lo que el entendió que
sería cuando Dios mismo viniese entre nosotros, como hemos leído en el profeta
Isaías.
Ø Cuando Dios viniese iba a
confundir, destruir los designios y caminos de los malvados, iba a destruir.
Ø En cambio lo que oye de
Jesús es diferente, este joven profeta come con pecadores, deja que las
prostitutas se acerquen a él, que las
mujeres enfermas lo toquen para sanarse, abraza a los niños, Juan no acaba de
entender.
Ø Al principio cuando
bautizó a Jesús estaba feliz porque ya había llegado el que había de venir,
pero ahora no está seguro de lo que entendió entonces
Ø Y envía como mensajeros
algunos de sus discípulos a preguntarle a Jesús "Eres tú o hemos de
esperara otros"
Ø Jesús no le responde directamente sino que le hace ver lo
que está pasando para que Juan entienda que esto es lo anunciado por el profeta
Isaías
Ø Los ciegos ven, los cojos
andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos regresan a la
vida, y la buena nueva se anuncia a los pobres.
Ø Y felices los que no se
escandalizan de mi, sino que saben descubrir en mi la presencia del Dios que
salva amando o amando salva.
Ø Cuando los mensajeros se
van Jesús hace un elogio de Juan:
v No es como una caña que
se mueve en la dirección del viento, Juan no cambia su mensaje ni su vida aun
amenazado de muerte
v No es alguien que viste
ropas finas, su vestidura es de pelo de camello. No viste fino porque las ropas
finas las llevan los que viven en palacios y no en el desierto.
v Juan es más que
profeta, es más, es el profeta anunciado
que venía a preparar el camino del Señor
v y es el más grande de los
hijos de mujer, pero el más pequeño en el reino que Jesús anuncia es más grande
que Juan.
Ø En cada uno de nosotros
cuando dejamos al Señor ser rey ser quien dirija nuestra vida, sucede todo
cuanto Jesús le dice a Juan:
v Empezamos a ver la
realidad, los seres humanos, nosotros mismos de manera diferente, vemos nuestra
verdad y por eso iniciamos un camino de conversión
v Caminamos buscando la
justicia y la verdad
v Nos acercamos a que el
Señor nos limpie de nuestra lepra
v Y empezamos a no sólo ver
la realidad en su verdad, sino que tenemos oídos para escuchar el clamor de
nuestros hermanos y hermanas que sufren
v Y aceptamos nuestra
pobreza y buscamos vivir pobres con lo necesario para poder escuchar el mensaje
de salvación del evangelio.
v Dichosos nosotros si
Jesús puede decir que no somos una caña que se mueve de acuerdo al viento, y
también dichosos nosotros si lo que Jesús predica no es causa de escándalo para
nosotros.
SEGUNDA
LECTURA Stgo 5,7-10
Antes de entrar en el texto de hoy, vamos a decir algo sobre la carta
misma:







Veamos ahora el fragmento de este domingo qué nos dice:
ü El autor invita a la
comunidad a ser paciente, y pone la comparación de la paciencia del campesino
que espera que lo sembrado de fruto a su tiempo
ü Invita también a
fortalecer el corazón, estar firmes podríamos añadir en la vivencia de nuestra
fe, ¿por qué? EL SEÑOR ESTÁ CERCA.
ü No se quejen unos de
otros, la razón es porque el Juez de todos está tan cerca que está a la puerta.
ü Termina este fragmento
con la invitación a mirar a los trabajos pasados por los profetas que hablaron
en nombre del Señor.
ü Todos estos consejos nos
ayudan a hacer realidad en nuestra vida lo anunciado por el profeta Isaías y
realizado por Jesús.
RINCON CLARETIANO

En todas las poblaciones de
que he hecho mención en el capítulo anterior y en otras de que no he hablado,
he predicado diferentes funciones con diferentes nombres. Aunque no se les
díase el nombre de Misión, porque las circunstancias de aquellos tiempos no
permitían ni siquiera mentar el nombre de Misión, (sin embargo), las materias
eran propiamente de misión, con el nombre de Cuaresma, Mes de María,
Quincenario del Rosario, Novenario de almas, Octavario del Sacramento,
Septenario de Dolores. Estos eran comúnmente los nombres que dábamos a las
funciones, y aunque el nombre fuera un novenario, si convenía, se alargaban los
días que se tenía por conveniente. San Antonio
María Claret, Fundador de las Misioneras Claretianas, Autobiografía 468.
BIBLIOGRAFIA
CLARET, Antonio María , Autobiografía.
NOLAN, Albert, Jesus Before Christianity, traducción al
español ¿Quién es este hombre?, 1976.
PARIS,
María Antonia, Autobiografía
PAGOLA, José Antonio. El Camino abierto por JESUS. 2012.
SCHÖKEL, Luis Alonso, Comentarios
en la Biblia de Nuestro Pueblo. 2010.
No comments:
Post a Comment