22 DOMINGO DEL
TIEMPO ORDINARIO - A – 2023
ü El profeta Jeremías
confiesa que no puede dejar de hablar lo que Dios le revela, es como fuego en
su interior que le impulsa a seguir hablando.
ü Jesús nos dice que quien
quiera seguirle necesita antes negarse a
si mismo.
ü Pablo nos invita a
ofrecernos como sacrificio viviente y santo agradable a Dios
ü El seguimiento de Jesús,
nuestra respuesta a su llamada comporta gozos y sufrimientos al mismo tiempo,
pero su amor y su llamada son tan fuertes que no podemos dejar de seguirlo y en
ello encontramos la fuente de nuestra alegría, a pesar de las dificultades y
oposiciones.
ü El Papa Francisco tiene
una reflexión sobre este evangelio, dice que quien no sigue a Jesús es como la
sal que ha perdido el sabor….
ü Y el Papa Benedicto XVI
dijo sobre este pasaje del evangelio que “Aceptando voluntariamente la muerte, Jesús lleva la cruz de todos los
hombres y se convierte en fuente de salvación para toda la humanidad.”
PRIMERA LECTURA Jer 20:7-9
v Este fragmento
está tomado del final de la sección llamada “confesiones de Jeremías” que
empieza en el capítulo 10.
v A lo largo de
todos estos capítulos se van intercalando en el libro de Jeremías lo que se ha
llamado “confesiones” textos que revelan una intimidad sin igual del profeta
con su Dios. Todos estos textos son de
una belleza extraordinaria y nos revelan la figura de un hombre enamorado de su
Dios.
v Me sedujiste…
palabras fuertes que revelan la lucha interior de este hombre totalmente
enamorado de Dios y al mismo tiempo cansado de sufrir por causa de la palabra
que se vuelve fuego en su interior
v Tú fuiste más
fuerte que yo por eso me pudiste, esta es una imagen muy fuerte que describe lo
que pasa en la seducción, y Jeremías dice que esto es lo que ha sucedido entre
Dios y él.
v La queja de
Jeremías por esta seducción es que desde entonces tiene que hablar lo que Dios
le revela, y lo que le revela son las desgracias que su pueblo sufrirá como
consecuencia de su infidelidad que le llevará por caminos extraviados.
v Y el mismo
Jeremías nos dice que en su interior toma la decisión de no escuchar ya más, y
de no transmitir el mensaje, de no hablar más en nombre de Dios
v Pero ¿qué
pasa? No puede y ¿por qué?
v La palabra se
ha vuelto fuego dentro de él y tiene que sacarla, pronunciarla, darla porque no
puede resistir el sufrimiento que le causa guardarla sin compartirla.
v ¡Qué imagen
tan hermosa del amor a la Palabra, del poder de seducción que tiene la Palabra!
v ¿Nos hemos
dejado seducir como Jeremías? ¿Es la Palabra de nuestro Dios fuego que nos
quema las entrañas?
v Si aún no lo es, pidámosle a Dios, a Jesús que su palabra se vuelva fuego que nos abrase para que podamos abrasar el mundo entero en su amor.
SALMO RESPONSORIAL Sal 63, 2. 3-4. 5-6.
8-9
v Salmo
de confianza estructurado en tres cánticos:
o el
de la sed (2-4)
o el
del hambre (5-9)
o el
del juicio divino (10-12)
v La
sed de Dios será saciada y el hambre de Dios será colmada
v Jesús
desde la cruz, según nos dice San Juan, dice “tengo sed” y durante su vida en
su predicación nos ha dicho donde podemos saciar nuestra sed de Dios.
v Nuestra
y nuestra hambre serán satisfechas solo por el amor de nuestro Dios.
v Estas
palabras de Jesús “tengo sed” fueron las que cambiaron la vida de M. Teresa de Calcuta le dieron
fuerza para entregarse a los últimos de los últimos entre los seres humanos.
R. (2b) Señor, mi
alma tiene sed de ti.
Señor, tú eres mi Dios, a i te busco;
de ti sedienta está mi alma.
Señor, todo mi ser te añora
como el suelo reseco añora el agua.
R.
Señor, mi alma tiene sed de ti.
Para admirar tu gloria y ti poder,
con este afán te busco en tu santuario.
Pues mejor es tu amor que la existencia;
siempre, Señor, te alabarán mis labios.
R. Señor, mi alma tiene sed de ti.
Podré así bendecirte mientras viva
y levantar en oración mis manos.
De lo mejor se saciará mi alma;
te alabaré con jubilosos labios.
R. Señor, mi alma tiene
sed de ti.
Porque fuiste mi auxilio,
y a tu sombra, Señor, canto con gozo.
A ti se adhiere mi alma
y tu diestra me de seguro apoyo.
R. Señor,
mi alma tiene sed de ti.
EVANGELIO Mt 16,21-27
v Después de la confesión
de Pedro, “tú eres el Cristo, el Mesías” que leíamos el domingo pasado Jesús empieza
a enseñarles lo que significa que él es el Cristo.
v Ser el Cristo, su
fidelidad a su misión va a comportar para Jesús sufrimiento, desprecios, persecución
y finalmente muerte.
v Pero la muerte no será el
final, porque al tercer día resucitará.
v ¿Qué significa que
resucitará? ¿Qué quiere decirnos? No entendemos…
v Pedro, el hombre amigo
íntimo de Jesús, al que quiere con todo su ser, el Pedro siempre impulsivo
vuelve a hablar, pero esta vez no repite las palabras del Padre, sino las suyas
propias.
v ¡No lo quiera Dios Señor!
¿Cómo va a ser esto verdad? Imposible, tú eres el Cristo ¿no te acuerdas? Y el
Cristo no puede sufrir, ni ser derrotado.
v Pedro tú piensas como
hombre, Jesús les está invitando, nos está invitando a ver la vida con los ojos
del Padre que sabe cuál es nuestro bien.
v La respuesta de Jesús es
fuerte “ponte detrás de mi Satanás…” ¿qué sentiría Pedro al oírse llamar
Satanás, es decir “tentador”.
v ¿Podía Pedro con sus
palabras, ser tentación para Jesús? Esto
es un misterio insondable.
v ¿Acaso le pasaba a Jesús
lo que a Jeremías? No hablaré más de ti, pero no, tu palabra es fuego dentro de
mi. Serían las palabras de Pedro eco de la tentación en el desierto: tú puedes
ser Mesías de una manera más fácil y espectacular y todos te seguirán….
convierte las piedras… tírate abajo… arrodíllate ante mi…
v ¿Por qué ponte detrás,
que es lo mismo que sígueme? Porque quien va delante es el maestro, el
discípulo sigue al maestro.
v Y Jesús les da la gran
lección, la gran revelación:
o
Quien quiera seguirme, irá detrás de mi,
§ renuncie a si mismo =
niéguese
§ Tome su cruz, su vida, su
propio ser
§ Y venga detrás de mi
o
Y esto por qué,
§ Porque quien quiera
salvar su vida al margen de mi, la perderá
§ Pero quien la pierda por
mi y conmigo la encontrará de nuevo
§ Porque qué le aprovecha a
un hombre o a una mujer ganar todo el mundo si pierde en ello su vida.
§ Y ¿qué podrá dar entonces
a cambio de su vida, o para rescatarla?
v Este evangelio nos
enfrenta a la pregunta fundamental de nuestra vida, el seguimiento de Jesús al
que hemos sido llamados antes de ser concebidos, y que se ha hecho visible y
público en nuestro bautismo.
v En nuestro bautismo fuimos
sumergidos en la muerte y resurrección de Jesús para ser otros cristos y así
continuar en el mundo su misión de buscar los hermanos y hermanas que se han
perdido por el camino.
v Termina el evangelio de
este domingo con estas palabras de Jesús: el Hijo del hombre vendrá al final de
los tiempos, vendrá no en la humildad como ahora, sino en la gloria del Padre
que es su gloria, y dará a cada cual lo suyo.
v Ven Señor Jesús ya desde ahora y tú que eres el camino, camina con nosotros para que cuando vengas al final nos digas las palabras tan esperadas “ven bendito, ven bendita de mi Padre porque me amaste en cada hermano y hermana necesitado que encontraste en el camino de tu vida”.
SEGUNDA LECTURA Rom 12,1-2
Pablo nos urge a ofrecernos, ofrecer nuestros cuerpos,
nuestro ser a Dios como ofrenda agradable y santa.
En nuestro bautismo fuimos ungidos “sacerdotes, profetas
y reyes”. Nuestro ser sacerdotal nos capacita para ofrecer sacrificios a Dios,
y nuestro sacrificio es nuestra propia vida “sus cuerpos”
¡Qué consuelo da y qué entusiasmo despierta en cada uno
de nosotros saber que mi vida, sencilla, a veces rota, oculta a los ojos del
gran mundo, puede ser una ofrenda agradable a Dios si se la ofrezco con
sencillez y humildad!
Esta vida mía se convierte entonces en un culto de
adoración a Dios.
Sí, mi vida de esposo o esposa, de padre o de hijos, de
sacerdotes, de laicos, de religiosos, de ancianos, jóvenes y niños…
Esta vida mía tiene la posibilidad de ser una ofrenda de adoración a mi
Dios.
Sigue Pablo y nos invita a no conformarnos con la mente
del mundo de pecado, del mundo que vive al margen de Dios y del bien de los
demás.
Dejémonos transformar renovando nuestra mente, nuestra
manera de ver la vida, dejémonos encender por el Espíritu de Jesús para que así
podamos conocer lo que es bueno y agradable a Dios nuestro Padre, a Jesús
nuestro hermano, al Espíritu nuestro maestro.
El fundamento de la pastoral humanizadora está en el evangelio en la salvación integral que Jesús vino a traer y la quiere hacer llega a todas aquellas personas que el mismo Dios a través de la Iglesia le ha confiado. No hay acepción de personas, más allá de la cultura, raza, patria, color, riqueza, sexo, todos tienen la misma dignidad de hijos de Dios. Llama la atención su trato afable y sencillo con todos; la dedicación de su tiempo sin distinción de clases o posiciones. Confiesa personalmente a gentes de toda clase, raza, nivel social y económico y, postura política. Su acción social nace de su celo por la salvación de la persona de su amor a la justicia.
Como presidente de la Real Sociedad Económica de Amigos del País promueve el desarrollo humano de su pueblo. En sus reuniones discutían los planes económicos, educacionales, sociales y sanitarios más urgentes de la población. …
Claret trazaba nuevas vías a la solidaridady
preparaba el camino al Evangelio, así se lo explica a Caixal “a más de darles
el pasto espiritual, se les da también el corporal por medio de limosnas, de
las Cajas de Ahorros y de los cuadernos de agricultura. (Galerón pp 29-30)
BIBLIOGRAFÍA
GALERÓN, María Soledad RMI. Llamada que la Memoria de Significativos
Acontecimientos Históricos Congregacionales nos hacen Hoy. Santiago de Cuba 2023.
LA BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO. Texto de Luis Alonso Schökel.
LA BIBLIA, traducción tomada de la página web del Vaticano.
Pagina Web del Vaticano, Papa Benedicto XVI ángelus 8/28/2011; Papa
Francisco ángelus 8/31/2014.
PAGOLA, José A. El camino abierto
por Jesús. PPC 2012.
STOCK, Klemens. La Liturgia de la Palabra. Ciclo A (Mateo) 2007.