La primera lectura tomada del Segundo libro de Samuel y
el evangelio de Lucas nos presentan dos pecadores que hallan la misericordia de
Dios.
Dios está siempre dispuesto a empezar de nuevo, pero
espera que nosotros también estemos dispuestos a ello para que su voluntad o
deseo se haga realidad en cada uno de nosotros.
El domingo pasado el evangelio nos invitaba a reflexionar y experimentar la
compasión de Dios Padre a través de su hijo encarnado Jesús; y a obrar en
consecuencia, es decir a dejarnos llevar de la compasión y así tratar a
nuestros hermanos y hermanas
Hoy el evangelio nos presenta la misericordia de Dios Padre hacia los
pecadores, su bondad sin límites expresada en la bondad de su Hijo encarnado
Jesús. Estamos invitados también a ser misericordiosos, sentir en nuestro
corazón la miseria, la necesidad ajena.
Otro tema de este domingo es el de la hospitalidad.
Hospitalidad en acoger tanto en nuestra casa como en nuestro corazón. Hospitalidad
que se manifiesta en acciones concretas: lavar los pies, beso de paz, unción de
la cabeza...
PRIMERA LECTURA,
SEGUNDO LIBRO DE SAMUEL 12,7-10,13
ü Este capítulo 12 antes de
la lectura que haremos este domingo nos cuenta como el profeta Natán por medio de
una parábola ayuda a David a reconocer su pecado de adulterio y de homicidio y
de infidelidad a Dios y a su pueblo.
ü Cuando David se enoja
contra el hombre de la parábola que ha robado la única oveja que el otro tenía
Natán le dice "Tú eres ese hombre".
ü El profeta Natán es
enviado por Dios a David para poner al descubierto sus pecados, para quitar el
velo de hipocresía y satisfacción propia que llenaba el corazón del rey David,
que tal vez se había olvidado que estaba llamado a ser pastor no de ovejas,
como en tiempo de su juventud, sino de su pueblo Israel.
ü El profeta de parte de
Dios le recuerda todo cuanto ha hecho por él, todo cuanto le ha dado:
v la victoria sobre Saul
v el reino, todo cuanto era
de Saul incluso sus esposas que ahora son esposas de David
v La casa de Israel y la de
Judá
v Y Dios le dice que podría
seguir contando los bienes que le ha dado y le ha hecho.
ü Pero David en lugar de
seguir siendo el humilde pastor en su corazón, se ha dejado envenenar por el
poder y la fuerza. Ha usurpado como suyo lo que ha recibido como regalo de Dios
y ha cometido pecado:
v Se ha quedado con la
mujer de Urías como mujer suya, se la ha quitado a otro hombre. El tiene
decenas de esposas y le quita la única que tiene ese hombre bueno que es Urías.
v No contento con este
pecado ha maquinado el asesinato de Urías usando manos extranjeras pensando que
su pecado quedaría encubierto.
ü Porque ha hecho esto que
es tan abominable, como él mató a espada a Urías, la consecuencia de su pecado
es que las espada, las muertes, los asesinatos no se apartarán de su casa, de
su dinastía.
ü David dice a Natán "He
pecado contra Dios".
ü Natán dice a David de
parte de Dios "El Señor te ha perdonado tu pecado, no morirás."
SALMO RESPONSORIAL Sal
32
SEÑOR, PERDONA EL
MAL QUE HE HECHO
¡Feliz el que ha
sido absuelto de su pecado
y liberado de su
falta!
¡Feliz el hombre a
quien el Señor
no le tiene en
cuenta las culpas,
y en cuyo espíritu
no hay doblez!
Pero yo reconocí
mi pecado,
no te escondí mi
culpa,
pensando:
«Confesaré mis faltas al Señor».
¡Y tú perdonaste
mi culpa y mi pecado!
Tú eres mi
refugio,
tú me libras de
los peligros
y me colmas con la
alegría de la salvación.
¡Alégrense en el
Señor, regocíjense los justos!
¡Canten jubilosos
los rectos de corazón!
EVANGELIO Lc 7,36-50
v Este evangelio nos presenta dos personas que entran en relación con Jesús:
Un fariseo, hombre de bien,
que se esfuerza en cumplir la ley, es considerado bueno.
Una mujer de mala vida,
prostituta, que no sabe de la ley, que es mal vista por la sociedad y por los
mismos que la usan para su placer.
Ambos tienen algo que ver con
Jesús en este relato evangélico
v El fariseo ha invitado a Jesús a comer en su casa, a sentarse a su misma
mesa, aunque no está de acuerdo con lo que este "profeta" hace y
dice.
v Jesús ha aceptado la invitación aun sintiéndose no acogido totalmente en
ese ambiente de fariseos, pero él ha venido para todos, para los que saben que
están extraviados y para los que no lo saben, pues su situación es peor que la
de los otros.
v Están comiendo y conversando disfrutando de los manjares y bebidas, cuando
alguien viene a desbaratar este momento de compartir. Es una mujer pecadora
pública, dice el evangelio. Es decir alguien de quien se ve el pecado, no está
oculto como en la mayoría de nosotros, y por eso nos consideramos tantas veces
del grupo de los buenos, los sin pecado, al menos sin el pecado de esta
mujer.
v La mujer va directamente hacia Jesús, se arrodilla a sus pies, es decir
detrás de él, y manifiesta su agradecimiento y su dolor:
Ø baña los pies de Jesús con sus lágrimas
Ø se los seca con sus cabellos
Ø los besa con amor
Ø unge los pies de Jesús con unguento perfumado
v Seguramente que todos los comensales están extrañados, escandalizados, pero
sobre todo el Fariseo, pero ninguno dice nada, solo murmuran en sus corazones.
"Si fuese profeta sabría..."
v Y ciertamente sabe, y porque sabe se deja tocar por la mujer, y la
restituye a la gracia, a la libertad, a la dignidad de persona humana que se
respeta a si misma.
v Y Jesús se dirige a Simón que está muy dispuesto y contento que Jesús
quiera decirle algo, lo que no sabe es lo que le va a decir.
v Pero las palabras que le va a decir son para ablandar su corazón y buscar
como la mujer el perdón de sus pecados.
v Dos deudores, ambos perdonados, uno con una deuda enorme, el otro con una
deuda más pequeña, pero ambos incapaces de cancelar la deuda. El acreedor los
perdona.
v La pregunta de Jesús es ¿quién le amará más? aquel a quien se le ha perdona más, buena
respuesta, pues mira esta mujer ha hecho todos los actos de hospitalidad que se
suponía hicieras tu conmigo pero no los hiciste, señal de que amas menos, es
cierto que has pecado menos, pero también es cierto que amas mucho menos.
v Jesús habla a la mujer "tus pecados te son perdonados."
v ¿quién es este para perdonar pecados? sólo Dios puede hacerlo. No son
capaces de sacar la consecuencia, entonces es que Dios nos está visitando.
v NO puede ser porque Dios, el Dios que nos hemos fabricado, no habría
permitido que esta mujer lo contaminara con su pecado, no hubiese permitido que
entrara o la hubiese echado.
v Pero Jesús, el profeta de Nazaret, ha venido para hablarnos del Dios
verdadero, de como es, y resulta ser que es padre bondadoso que da
continuamente la vida y por eso perdona.
v Tu fe te ha salvado, porque has creído que yo puedo sanarte, al sentirte
sanada has venido a darme las gracias.
v VETE EN PAZ. Sí vete en paz porque
Dios te ama y te acoge y te restituye a tu dignidad de hija. Simón tú de
momento no puedes experimentar lo que esto es, pues no eres capaz todavía de
reconocer humildemente que eres pecador, que estás desnudo y que te falta de
todo, como dice el Espíritu a una de los obispos del Apocalipsis.
SEGUNDA LECTURA. Gálatas 2,16.19-21
·
Pablo escribió esta carta a
las comunidades que había fundado en la región de Galacia, situada en el centro
de lo que es actualmente Turquía. Era
una región apartada en que los miembros de la comunidad cristiana eran
exclusivamente de origen pagano. Pablo estuvo por aquella región en tiempo de
una enfermedad que sufrió.
·
La lectura de este próximo
domingo nos pone de frente a la polémica de Pablo para convencer a sus
destinatarios que la salvación no viene porque hayamos hecho obras buenas, sino
porque Cristo nos ha salvado, y por la fe en él esta salvación viene a
nosotros. La cosa va al revés hacemos obras buenas porque hemos sido salvados y
hemos acogido la salvación que se nos regala.
·
En el v. 19 y ss. dice que por medio de la ley ha muerto a la
ley. La ley es la que lo llevo a perseguir la nueva fe, el nuevo camino, y en
ese camino encontró a Cristo resucitado que le descubrió que la ley no salva,
sino la fe en resucitado, y desde entonces vive para Dios.
·
A continuación afirma que:
v Ha quedado crucificado con Cristo
v y que ya no vive él, sino que es Cristo quien vive en él. Tal es la
intimidad de su unión con el Señor que se le presentó en el camino.
v Sique diciendo que mientras vive en carne mortal, es decir mientras vive en
este mundo, vive de la fe en el Hijo de Dios que "me amó y se entregó por
mi."
v Termina diciendo que no anula la gracia, pero que si se pudiese alcanzar la
justicia, o la justificación o la salvación, como queramos llamarlo, por la
ley, Cristo hubiese muerto inútilmente.
v Ciertamente si hubiésemos podido alcanzar la salvación por nosotros mismos
no hacía falta que el Hijo del Padre se encarnara para enseñarnos el camino de
regreso al Padre.
Estamos
invitados:
v a relacionarnos con nuestros hermanos y hermanas con misericordia,
v a practicar la hospitalidad acogiendo en nuestro corazón a los otros
hermanos y hermanas que se acercan a nosotras, que forman parte de nuestra vida
y a aquellos que ni siquiera conocemos.
v a creer que no nos salvamos sino que somos salvado
RINCON CLARETIANO
Otras muchas veces me ha dado
Nuestro Señor la gracia de haberlo seguido con tanto desprendimiento de todas
las cosas y tanta confianza en su Divina Providencia. Esto siempre lo hace
Nuestro Señor con gran afecto de agradecimiento, y me dice con mucho amor. ¡Ah
hija mía! si los hombres se desprendieran de sí, y sólo confiaran en mí,
entonces conocerían lo que yo hago por ellos. Venerable María Antonia París, Fundadora de las
Misioneras Claretianas, Autobiografía- Segunda Relación 91.
¡Oh Jesús
mío!, os pido una cosa que yo sé me la queréis conceder. Sí, Jesús mío, os pido
amor, llamas grandes de ese fuego que Vos habéis bajado del cielo a la tierra.
Ven, fuego divino. Ven, fuego sagrado; enciéndame, abráseme, derrítame y
derrítame al molde de la voluntad de Dios. San Antonio María Claret, Fundador de las
Misioneras Claretianas, Autobiografía 446.
BIBLIOGRAFÍA:
CLARET, Antonio María , Autobiografía.
PARIS, María Antonia, Autobiografía
PAGOLA, José, Following in the Footsteps of Jesus.
Meditations on the Gospels for Year C. 2012.
RAVASI, Gianfranco, Según Las Escrituras, Año C, 2006
SAGRADA BIBLIA - Versión oficial
de la Conferencia Episcopal Española.
No comments:
Post a Comment