- La
lectura del evangelio de hoy tiene que ver de nuevo con un cobrador de
impuestos.
- La
semana pasada era una parábola en que el cobrador de impuestos reconocía
su pecado y fue justificado y regresó nuevo a su casa, no así el orgulloso
fariseo.
- Hoy se trata de un personaje real, no de parábola, sino de la vida real: Zaqueo, el cobrador de impuestos Jericó que quiso ver a Jesús, y Jesús le sorprendió porque él también lo buscaba.
LIBRO DE LA SABIDURÍA
v La
liturgia de la iglesia nos pone de nuevo en la primera lectura un libro
sapiencial, se trata del libro de la Sabiduría.
v Este
libro está considerado como "Deuterocanónico", es decir de los libros
reconocido como revelado por la iglesia católica, pero no reconocido ni por la
comunidad de fe de Israel, ni por las iglesias cristianas de otras tradiciones
diferentes a la católica.
v Los
capítulos del 11 L 19 del libro de la Sabiduría son una meditación sapiencial
sobre el Éxodo.
v Dice
GIanfranco Ravassi en su comentario sobre la primera lectura en los cc. 11-19 de esta joya de la
literatura griega judía de Alejandría de Egipto hay un espléndido párrafo sobre
el amor invencible de Dios por sus criaturas, aunque pecadoras.
PRIMERA LECTURA: Sab
11,22-12,2
ü Todo lo
creado es mínimo, pequeñísimo ante Dios, pero Dios cuida de todo y de
todos.
ü Sobre
todo Dios cuida del ser humano, y la Sabiduría nos dice que es porque él lo
puede todo,
ü y añade
algo sorprendente, Dios cierra los ojos, no quiere ver a nuestros pecados, para
darnos oportunidad de convertirnos.
ü ¡Qué
imagen tan diferente de Dios, de la que muchas veces proyectamos con nuestros
palabras y con nuestras actitudes!
ü Otra
expresión preciosa es la del versículo 26
pero a todos perdonas porque son tuyos, Señor amigo de la vida.
ü Dios es
amigo de la vida, y parecería que nosotros somos amigos de la muerte, pues la
sociedad que hemos edificado y seguimos formando está llena de la violencia de
la muerte.
ü ¡Cómo
nos hemos dejado engañar por el espíritu del mal, que nos hace creer que lo
bueno es malo y lo malo es bueno!
ü Dios
hace todavía más nos reprende poco a poco, de la manera que sólo él sabe
hacerlo y así poco a poco nos va moldeando y dando la oportunidad de descubrir
su presencia en nuestra vida, y cuando esto sucede ya no podemos resistirnos
más a su amor y nos entregamos.
SALMO RESPONSORIAL 145,1-2. 8-9. 10-11. 13,14
BENDECIRÉ TU NOMBRE POR SIEMPRE JAMÁS, MI REY Y MI DIOS.
Te alabaré, Dios mío, a ti, el único Rey,
y bendeciré tu Nombre eternamente;
Día tras
día te bendeciré,
y alabaré tu Nombre sin cesar.
El Señor es
bondadoso y compasivo,
lento para enojarse y de gran misericordia;
el Señor es
bueno con todos
y tiene compasión de todas sus criaturas.
Que todas tus obras te den gracias, Señor,
y tus fieles te bendigan;
que anuncien la gloria de tu reino
y proclamen tu poder.
Tu reino es un reino eterno,
y tu dominio permanece para siempre.
El Señor es fiel en todas sus palabras
y bondadoso en todas sus acciones.
El Señor sostiene a los que caen
y endereza a los que están encorvados.
Ø La alabanza a Dios por
sus obras en favor de los hombres ha sido cantada de generación y generación,
hasta llegar al salmista.
Ø Él tiene que seguir esta
cadena y lo hace cantando las alabanzas de Dios.
Ø Esta alabanza es la del
poeta, pero también la de todo viviente.
Ø Unámonos nosotros a esta
alabanza, cantemos, dancemos de júbilo porque nuestro Dios nos ama y es grande
y poderoso.
EVANGELIO Lc 19,1-10










v ha entrado en la casa de
un pecador, como si no fuésemos todos pecadores
v la salvación ha entrado
en esta casa, sí con Jesús viene a nosotros la salvación en todos los aspectos
de nuestra persona.
v Todo es restaurado hecho
nueva creación.



SEGUNDA LECTURA 2 Tes 1,11-22
v Se discute entre los
estudiosos de la Biblia si Pablo el autor de esta carta o lo es más bien uno de
sus discípulos.
v El autor ruega a Dios
para que la comunidad de Tesalónica se haga digna de la llamada recibida, y
viva su fe con responsabilidad.
v Todo esto para que sea
glorificado y honrado el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
v Parece ser que en la
comunidad de Tesalónica había preocupación debido a cosas que les habían dicho
algunos como si Pablo les hubiese escrito.
v El autor les dice que él
no les ha escrito nada al respecto.
v Luego les tranquiliza
diciéndoles que la venida del Señor no es eminente como algunos creen.
v En esto hay una gran
diferencia con la Primera Carta a los de Tesalónica, que fue la primera escrita
por Pablo, en que Pablo hablaba de la cercanía de esta venida de Cristo.
v Es cierto que Pablo evolucionó en su teología
a lo largo de su vida, como nos pasa a todos a medida que avanzamos por el
camino de la vida, y que nuestra
relación con el Señor se hace más profunda y connatural.
Esta seguridad que ella se
prometía, por mi modo de proceder en la religión, era una pena intolerable para
la que tan poca tenía. En fin, me fui a la celda como pude, que no fue menester
poca gracia de Dios para animarme. Aquí empecé a dar quejas a Nuestro Señor y
decíale: «¿Hasta cuándo, Señor y Dios mío, hasta cuándo aguardáis a poner fin a
mis lágrimas? Bien veo, Señor mío, que por mis grandes pecados no soy digna de
ver vuestra Divina luz, ni vivir en vuestra Casa, pero Señor mío y Padre mío,
manifestadla siquiera a vuestros Ministros intérpretes de vuestra Voluntad,
para que acierten ellos a dirigir mis pasos según Vuestro Divino Querer.
Decidme Señor, qué es lo que debo hacer en lance tan apretado; no os hagáis
Señor mío más sordo a mis lágrimas. Tiempo es ya que manifestéis Vuestra
Santísima Voluntad. Nueve años que estoy aguardando vuestros divinos designios,
ya no puedo esperar más. No permitáis oh Dios mío, que por mis ingratitudes
pierda la felicidad que tengo a la mano y vaya a ser una infeliz sin remedio.
Dividir mi corazón es el dejar madres y hermanas tan queridas pero arrancar mi
alma, será arrancarme de Vuestra Santa Casa, Señor. Pero Redentor mío, con tal
que salvéis mi alma, salvadla por los medios que Vos queráis aunque sea
padeciendo martirio toda mi vida, cual será si tengo de vivir en el siglo. El amor
a la clausura me hacía una fuerza invencible, pero el amor a Vuestra Santísima
Voluntad Señor, me rinde a todo sacrificio. Justo sois Señor, y la misma
equidad y justicia, y si mis pecados en Vuestra Santa Casa merecen este
castigo, cúmplase Señor, Vuestra Divina
Voluntad. Venerable María
Antonia París, Fundadora de las Misioneras Claretianas, Autobiografía 106
En los domingos y fiestas, en muchas poblaciones, como los hombres tenían
las armas, les hacían asistir a los ejercicios militares, y de esta manera no
podían asistir a la Misa y demás funciones de religión, como acostumbraban. Se
impedía el bien y se fomentaba toda especie de mal. En todas partes no se veían
más que escándalos y horrores, ni se oían más que blasfemias y disparates.
Parecía que todo el infierno se había desencadenado.
San Antonio María Claret, Fundador de
las Misioneras Claretianas, Autobiografía 459.
BIBLIOGRAFÍA
CLARET, Antonio María Claret, Autobiografía.
PAGOLA,
José A. Following in the Footsteps of
Jesus. Meditations on the Gospels for Year C.
PARIS, María Antonia, Autobiografía
RAVASI, Gianfranco, Según
las Escrituras, Año C.
The Catholic Study Bible
-New American Bible.